Como os explicamos este martes, el Real Madrid aún no ha movido un dedo para fichar a Kylian Mbappé (24 años, 34 partidos y 29 goles en L1 para la temporada 2022 -2023), expulsado por el Paris Saint-Germain a un año de la finalización de su contrato, que se niega a prorrogar.
Simplemente porque la Casa Blanca sabe que está en una posición de fuerza.
Al principio, parecía estar esperando el crack de Bondy el próximo verano, como jugador libre. Pero finalmente podría pasar de esta ventana de transferencia, probablemente jugando el reloj hasta el final, aunque tiene los medios económicos para conseguirlo de inmediato. En materia de nómina, el Madrid tendría un margen de 200 millones de euros respecto al tope impuesto por LaLiga, y el club de la capital española también tiene reservas suficientes para pagar su compensación por el traspaso, que debería estar entre 150 y 200 millones de euros.
Hay que decir que tras la marcha de Karim Benzema de Arabia Saudí, el Madrid ha fichado a un solo delantero, Joselu, y eso parece poco para un club que aspira a ganar la Champions todos los años.
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