En el marco de la inauguración del curso 2023-2024 del Instituto Universitario de Mediadores Lingüísticos (Limec), el ex entrenador del Real Madrid Fabio Capello contó algunas anécdotas sobre el mal estilo de vida de algunos de sus exjugadores.
Si el italiano se peleaba a menudo con Antonio Cassano, que pedía patatas fritas antes de cada partido, era sobre todo el brasileño Ronaldo el que más problemas le causaba.
“En febrero de 2007 decidí despedir a Ronaldo, era una persona a la que le gustaba la fiesta y que llevaba al grupo a las salidas. Un día, vino Van Nistelrooy y me dijo: ‘Señor, esto huele a alcohol en el vestuario’. Y era cierto. Ronaldo pesaba 94 kg ese año (2006-2007). En Corea del Sur, durante el Mundial de 2002, pesaba sólo 82 kg. Le dije que bajara de peso… llegó a 92,5 kg», recordó el ganador de la Liga de Campeones de 1994.
Capello cuenta la historia detrás del traspaso del «R9» al Milán: «Berlusconi (presidente del AC Milan) me llamó un día para pedirme consejo sobre una posible compra de Ronaldo. Le aconsejé que no lo hiciera, diciéndole que era un fiestero y lo único que quería hacer era estar rodeado de mujeres. Me dijo: ‘Está bien, gracias Fabio’. Al día siguiente, Ronaldo fichó por el Milán”, afirmó el extécnico, de 77 años y sin trabajo desde que dejó el club chino Jiangsu en 2018.
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