La Confederación Brasileña de Fútbol lleva varios meses nadando en aguas turbulentas. Primero por los resultados de la selección de Fernando Diniz, que acumula tres derrotas seguidas en la clasificación para el Mundial de América del Norte prevista para 2026, incluido un revés en casa ante Argentina en una velada más que agitada en el Maracaná. Entonces surge la pregunta del técnico: ¿quién sucederá a Tite, sustituido por un trabajador temporal (Diniz) a más de un año de su marcha?
La pista más caliente la llevó Carlo Ancelotti, al finalizar su contrato con el Real Madrid en 2024.
Pero un giro inesperado al otro lado del Atlántico bien podría poner en peligro la llegada de Mister al cinco veces campeón del mundo.
En efecto, el actual presidente de la CBF, Ednaldo Rodrigues, está en el punto de mira de la justicia debido a un acuerdo con el fiscal firmado por el dirigente de 69 años cuando decidió rubricar normas que le permitieran ser elegido presidente de la CBF como candidato único en 2022 para un mandato de cuatro años. Se acaba de anunciar su despido por decisión judicial, lo que podría perjudicar al fútbol auriverde.
Según informa la Agencia France Presse, el tribunal invalidó así el acuerdo entre la Confederación y la Fiscalía de Río de marzo de 2022, que permitía la elección de Rodrigues al frente del organismo hasta 2026.
» El organismo deberá realizar nuevas elecciones dentro de 30 días y, hasta entonces, el presidente del Tribunal Superior de Justicia (STJD) será responsable de la administración de la CBF”, anunció la 21ª sala privada del Tribunal de Justicia Carioca en un comunicado publicado este jueves por la tarde. La FIFA también se ha hecho cargo del asunto, y las sanciones podrían ser terribles.
Si la agencia francesa añade que la CBF no quiso responder a las solicitudes, pero debería apelar esta decisión, la alta autoridad del fútbol mundial FIFA podría castigar a los miembros de la Confederación «si sus asuntos internos sufrieran injerencias externas», como afirma RMC Sport, y entre estas sanciones encontraríamos… ¡la exclusión de Brasil de las competiciones internacionales! La primera víctima podría ser, por tanto,… el Fluminense, ganador de la última Copa Libertadores y su participante del próximo Mundial de Clubes en Arabia Saudita (12.12-22.12).