Un comienzo de temporada catastrófico. Último en el campeonato desde hace mucho tiempo, el Olympique Lyonnais logró mostrar mejor cara bajo las órdenes de Pierre Sage.
Ahora decimoquinto, es decir, por encima de la plaza de play-off, el club del Ródano pretende vivir una segunda parte de la temporada completamente diferente a la que se desarrolló desde agosto hasta mediados de noviembre.
Después de tres victorias seguidas y de un partido contra el CA Pontarlier (N3) en la Copa de Francia que se avecina, el OL debe concentrarse ahora en el mercado de fichajes de invierno.
«Efectivamente hay algo, pero por el momento no son reclutas. Así que no, todavía no se están entrenando, de lo contrario serían reclutas», respondió primero Pierre Sage sobre Lucas Perri y Adryelson, los primeros reclutas invernales del Botafogo. «El deseo es doble. El primero es fortalecer al equipo para tener más recursos y más posibilidades, variedad en nuestro juego. Y el segundo es también dejar a los jugadores en un estado de confianza en relación a su posición. Es decir no necesariamente duplicar o triplicar posiciones donde hubo satisfacción».
“Estamos en un buen ritmo en ataque pero tenemos suficientes jugadores que tienen tanto la posibilidad de jugar como el nivel, tanto en términos de rendimiento como de disponibilidad mental en relación con el proyecto en el que se encuentran”, continuó el entrenador interino del OL.
Confirmado hasta final de temporada en su puesto en rueda de prensa. «Ciertamente, tenemos menos opciones que si todos se hubieran quedado. Pero en cualquier caso, quizás también sea la oportunidad para que algunos tengan una garantía un poco más rápida de jugar. Pero estas garantías, si las toman como garantías duraderas, esto puede ponerlos en peligro. El único interés de una garantía es precisamente cuestionarla y garantizar que pueda establecerse en el tiempo para aquellos jugadores que estén preocupados por esta posibilidad».
Entonces el mensaje llegó.
FUTBOLFRANCES.COM
