Ciertamente, marca menos goles que Jude Bellingham, ciertamente, quizás tenga un exterior menos sedoso que Luka Modric, o una visión de juego más precisa que Toni Kroos, pero aun así, Aurélien Tchouaméni es sin duda uno de los elementos básicos del sistema de Carlo Ancelotti.
En su segundo año en la capital española, el exjugador del AS Mónaco se ha consolidado como titular indiscutible con el Merengue, disputando ya 27 partidos en todas las competiciones.
Demostró que también era capaz de ayudar con éxito en defensa cuando la Casa Blanca vio una serie de lesiones en esa posición.
Pero, sobre todo, se ha transformado en un auténtico amuleto de la suerte. De hecho, cuando su entrenador lo alineó desde el principio, su equipo simplemente nunca ha experimentado una derrota esta temporada. En 21 largadas en todas las competiciones marca 19 victorias y dos empates.
Entendemos mejor por qué Carlo Ancelotti no duda mucho a la hora de consultar su nombre en la lista de titulares.
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