Claramente superior al Clermont, el Olympique de Marsella consiguió una victoria lógica en Auvernia (5-1), este sábado en la 24ª jornada de la Ligue 1. La tercera consecutiva desde la llegada de Jean-Louis Gasset al banquillo del OM que confirma su forma renovada y asciende temporalmente al 6º lugar del ranking.
Para este encuentro, Jean-Louis Gasset decidió relanzar la defensa de cuatro hombres. Un cambio táctico que no pareció inquietar a los marselleses. Instalado en el campo de Auvernia desde el principio, el equipo olímpico mostró buena cara y lógicamente abrió el marcador con un gol de Ndiaye.
Ya goleador contra el Montpellier la semana pasada, el delantero del Marsella volvió a marcar con un gol desde la superficie del área (1-0, 24).
Detrás de este gol, el OM relajó un poco su presión y los Clermontois, que tuvieron muchas dificultades para existir en la primera media hora, lograron desarrollar un poco de juego, sin crear ocasiones claras durante el primer tiempo.
La culpa la tiene un marsellés serio y vigilante, como las intervenciones de Balerdi en su área para privar a Nicholson de dos oportunidades de gol.
Tras este primer tiempo bien controlado, el Marsella sufrió un susto en el segundo acto. Si bien Clermont no se había vuelto realmente más peligroso hasta entonces, Boutobba aprovechó una mala expulsión de Merlin en un córner para igualar a su club de formación (1-1, 54º).
Hace unas semanas, los olímpicos podrían haber entrado en pánico tras este empate. Pero la llegada de Gasset hizo algo bueno en las mentes y Aubameyang rápidamente puso a su equipo al frente (1-2, 59º).
Por detrás, el OM se abrió paso con una rápida transición, tras una recuperación de Harit en el centro del campo, terminada por un potente disparo de Clauss bajo el larguero (1-3, 67.)
Luego Luis Henrique aprovechó un servicio de Moumbagna al final de un contraataque para anotar el punto (1-4, 80), cinco minutos después de que los dos jugadores entraran en juego.
Está claro que a Gasset todo le va bien… Al final del partido, Moumbagna también marcó un gol con un disparo desde unos veinte metros (1-5, 90+3).
Una fiesta para el OM y un calvario para Clermont…