A petición de su entrenador Hans-Dieter Flick, el FC Barcelona juega con una defensa muy alta en el campo. Esta estrategia permitió, en particular, neutralizar a los atacantes del Real Madrid durante el clásico (4-0) del pasado sábado en La Liga.
Pero el central catalán Íñigo Martínez (33 años, 10 partidos en la liga esta temporada) no oculta la complejidad de este método.
«Por supuesto que sufrimos», admitió el español entrevistado por Sport.
«Cuando tienes atacantes rápidos que saben jugar y ves a 50 metros detrás de ti… Por supuesto que sufrimos, eso no es todo. No es fácil. Pero. Cuando estamos así de bien juntos, los cuatro defensas están absolutamente seguros de que nueve de cada diez veces caerán en fuera de juego. Asumimos riesgos, es nuestra manera de jugar y seguiremos así».
Poco conocido por su velocidad, el exjugador del Athletic de Bilbao no es aficionado a las grandes carreras hacia su propia jaula.