Tras anunciar su marcha desde hace varios meses, Joshua Kimmich (29 años, 11 partidos en la Bundesliga esta temporada) se encamina hacia un cambio de rumbo.
El centrocampista o lateral derecho ha entrado en el último año de su contrato con el Bayern de Múnich. Lo que explica por qué sus dirigentes no se opusieron a su salida este verano.
Paris Saint-Germain y FC Barcelona intentaron aprovechar la apertura, sin éxito. Durante este tiempo, las conversaciones entre el internacional alemán y sus superiores nunca fueron interrumpidas.
Y según L’Equipe, las discusiones han avanzado bien en las últimas semanas. Suficiente para que el club bávaro dé por casi alcanzado el acuerdo.
Quizás un gran alivio para el Bayern.