Según información recogida por la Gazzetta dello Sport, Ángel Di María pediría un salario importante, más o menos el equivalente al que ganaba en París, concretamente 7,5 millones de euros netos por temporada.
ederico Cherubini, director deportivo de la Juve, pretendería ofrecer dos opciones al entorno del jugador. La primera sería ofrecer a Di María un contrato de dos años, lo que permitiría a los bianconeri aprovechar las ventajas del Decreto Crescita y sus consecuencias en el IRPF.
Este decreto establece que «cualquier trabajador por cuenta ajena, por cuenta propia o empresario que se convierta en residente fiscal italiano y se comprometa a permanecer como tal y a trabajar en territorio italiano durante los dos años siguientes, independientemente de su cargo o cualificación, sólo estará sujeto a impuesto sobre la renta sobre el 50% de sus ingresos.
La opción B, en cambio, se refiere a un contrato de un año, como pide Di María, pero a un salario inferior a los requisitos del futbolista argentino: 5 millones de euros, máximo 6, más bonos para llegar a 7,5 netos. No más, para que no resultara una operación demasiado pesada para la Juve.
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