A medida que se acercan los cuartos de final de la selección francesa ante Inglaterra (sábado, 20.00 horas), sin duda hay que tener en cuenta todos los parámetros respecto al resto de la competición. Entre ellos, la posibilidad de que los jugadores puedan ser suspendidos para una posible semifinal no es una excepción.
Así, Aurélien Tchouaméni y Jules Koundé, ya advertidos de tarjeta amarilla en partidos anteriores, deberán tener cuidado de no sacar una nueva para no verse privados del próximo partido de los Blues, si es que hay próximo partido.
Sin embargo, en caso de clasificación para las semifinales, los contadores se pondrían a cero y una advertencia recibida en esta etapa de la competencia no sería perjudicial en caso de una futura final de esta.
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