Demasiado ineficaz e incapaz de crear peligro, el Niza cayó sobre su césped ante el Montpellier

Montpellier's players celebrate at the end of the French L1 football match between OGC Nice and Montpellier Herault SC at the Allianz Riviera Stadium in Nice, south-eastern France, on March 8, 2024. (Photo by Valery HACHE / AFP) (Photo by VALERY HACHE/AFP via Getty Images)

Demasiado ineficaz e incapaz de crear peligro, el Niza cayó sobre su césped ante el Montpellier (1-2), este viernes, en la inauguración de la 25ª jornada de la Ligue 1.

Sexto partido consecutivo sin victoria en el campeonato para el club Riviera que rápidamente podría caer en la carrera por la Liga de Campeones.

Dos de los peores ataques del campeonato francés, ¿se acerca la purga? No realmente. En un recinto con gradas punteadas, Todibo enfrió el ambiente al marcar contra su campo en un córner sacado por Savanier (0-1, 10º).

Un duro golpe para los Aiglons que reaccionaron rápidamente. Dante, de nuevo, dio la vuelta al partido para Laborde, que envió un caviar a Boga, sin piedad en su cabezazo (1-1, 12º). Un inicio de partido atronador entre dos equipos que no dudaron en proyectarse hacia adelante.

Poco a poco el Gym fue soltando su juego y creando las mejores oportunidades. Laborde, con un cabezazo demasiado cruzado, y Thuram, con dos balones calientes dentro del área, no estuvieron lejos de dar la ventaja a los niçois.

El equipo de Montpellier estuvo alerta en los contraataques y aprovechó los numerosos errores de Bard para acercarse a la portería de Bulka. El portero polaco tuvo que perder antes del descanso con un penalti transformado por Savanier tras una mano de Laborde (1-2, 42).

Al regresar del vestuario, el Niza perdió un poco más el hilo del juego, sin lograr sacudir a un MHSC que era tan sólido atrás como eficiente adelante. La velada podría haberse convertido en una pesadilla para los locales sin una intervención salvadora de Thuram para impedir que Savanier anotara el doblete con un disparo a quemarropa.

Ofensivamente, el OGCN mostró poco o nada. Aparte de una gran oportunidad para Guessand, el equipo de Riviera perdió completamente sus posibilidades al llegar a los últimos 30 metros del equipo contrario.

En el último cuarto de hora, el Niza lo intentó todo por el todo. Pero con tan poca inspiración, los Aiglon daban la impresión de poder jugar durante horas sin marcar. Una situación que tensó a los jugadores, como Dante, furiosos tras una decisión polémica de R. Buquet, que no concedió penalti a Claude-Maurice tras un contacto en el área.

Lamentablemente para el brasileño, el marcador permaneció congelado hasta el pitido final. Una nueva mala actuación que podría perjudicar gravemente al Gym en la recta final…

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