Para Rennes, el futuro del prodigio Eduardo Camavinga está en boca de todos. Cortejado por los clubes más importantes, y principalmente por el Real Madrid, al centrocampista bretón parece ser la joya codiciada de Europa.
Mientras tanto, los “Rouge et Noir” están decididos a ofrecerle un nuevo contrato más allá de junio 2022, con la intención de asegurar su retaguardia en caso de una venta.
Sobre este punto, el presidente del Rennes, Nicolas Holveck, presionó este martes a su jugador.
“Intercambiamos, avanzamos, hablamos estuvimos la semana pasada en conversaciones. Pero no estoy acostumbrado a desvelar cómo va este tipo de negociaciones. Tiene contrato hasta 2022 y al final es Eduardo quien toma la decisión de su futuro”, recordó el directivo al diario Ouest-France.
Fuente: futbolfrances.com