Empujado durante la mayor parte del encuentro, el Paris Saint-Germain se enganchó en Estrasburgo (1-1) este sábado en nombre de la 37ª jornada de la Ligue 1. Un marcador de paridad que permite al club de la capital conquistar un 11º título de campeón de Francia. Un récord absoluto.
En un ya habitual 3-5-2, los parisinos empezaron bastante bien el partido con un Messi muy emprendedor en construcción. Un gran dominio colectivo que casi se hace añicos en un pase fallido de Bitshiabu, cerca de darle un regalo a Diallo. Minutos después encontramos al delantero senegalés con una bonita secuencia que derivó en una soberbia parada de Donnarumma.
No completamente serenos detrás, los visitantes apenas eran peligrosos. Hubo que esperar media hora para presenciar la primera emoción en el área alsaciana con una brillante parada de Sels frente a Renato Sanches. Antes del descanso, un poste izquierdo de Donnarumma impidió que Diallo abriera el marcador con un potente disparo al borde del área.
Al volver del vestuario, París no ofreció mucho y lo dejó pasar. Fue entonces cuando Danilo se destacó con una brillante apertura que propició el primer gol del marcador de Messi, perfectamente servido por Mbappé (0-1, 59º).
Su gol 496 en un gran campeonato, ¡un récord histórico! Altruista, La Pulga ofreció de inmediato un caviar al delantero francés, que inexplicablemente falló el gol en su tiro a quemarropa.
Pero París siguió siendo París. Y a Paris no le gustó que su ex. Gameiro, que entró unos minutos antes, aprovecharía la apatía de la defensa para igualar con gran acierto (1-1, 79º).
Un gol que no cambió mucho al final del partido, equilibrado y durante el cual ninguno de los equipos quiso exponerse para mantener este resultado: ¡Estrasburgo se mantiene oficialmente, París es oficialmente campeón!
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