El martes, el delantero del Paris Saint-Germain Kylian Mbappé (25 años, 31 partidos y 32 goles en todas las competiciones esta temporada) anunció su marcha, al final de su contrato el próximo mes de junio, a su presidente Nasser Al-Khelaïfi.
Pero el qatarí no se sorprendió, ya que el club capitalino «trabaja desde hace varios meses en la era post-Mbappé», explica Téléfoot este domingo.
Por tanto, la decisión del capitán de la selección francesa no fue «vivida como una tragedia», continúan nuestros compañeros.
Como era de esperar, el equipo rojiazul ya está trabajando en la ventana de transferencias del próximo verano con objetivos bien conocidos: Leny Yoro (Lille), Bernardo Silva (Manchester City) y Victor Osimhen (Nápoles).
