Rechazado por el Paris Saint-Germain, Kylian Mbappé (24 años, 43 partidos y 41 goles en todas las competiciones para la temporada 2022-2023) aún no tiene planes de marcharse este verano. Sorprendido por la decisión del campeón de Francia de despedir a su atacante para la gira en Japón y Corea del Sur, el Real Madrid se niega por el momento a dejarse llevar y prefiere esperar al próximo verano.
Según AS, la Casa Blanca disponía de 128,2 millones de euros en efectivo a 30 de junio. A esta suma, los Merengues pueden sumar hasta 265 millones de euros por «gastos imprevistos». Eso es un total de casi 400 millones de euros.
Lógicamente, el Madrid podría permitirse el lujo de culminar una operación de este tipo en las próximas semanas, en concreto para suplir la reciente marcha de Karim Benzema, que se marchó al Al Ittihad tras su aventura de 14 años en el Madrid. Pero Carlo Ancelotti aseguró recientemente que muy bien podría jugar un año con un solo 9, Joselu, recién llegado del Espanyol y fichado inicialmente para ser el suplente del delantero del Lyon.
Entonces, ¿realidad o farol? ¿De verdad esperarán casi un año para completar un traspaso deseado desde hace ya más de seis temporadas? La tentación de robarse el campeón del mundo de 2018 sin compensación alguna por el traspaso es fuerte y demostraría que el Real Madrid tiene un poder de atracción inigualable. Incluso para permitirse uno de los mejores jugadores del mundo en su mejor momento.
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