Citado en el Chelsea, cercano al West Ham pero en definitiva todavía en el Manchester United donde es persona non grata: así se resume en pocas palabras el incierto verano de Harry Maguire.
Si bien finalmente podría pasar la temporada en Old Trafford como suplente esporádico, el defensa de 30 años tendrá que comer su pan negro y rendir los pocos minutos que le den si quiere recuperar su escudo.
Presente en una rueda de prensa en vísperas de un peligroso viaje a Londres para enfrentarse allí al Tottenham, el técnico bátavo retomó la situación de su excapitán y le dio la pauta para volver a la palestra con los Red Devils:
«Me alegro Harry es aquí. Tiene que luchar por su posición, como todos en el equipo, porque hemos construido un equipo con dos jugadores para cada posición y los necesitamos. Depende de él decidir. Sabe lo que espero de él. Llevo aquí un año y ya sabes lo que espero de un central. Y él puede hacerlo. Lo dije muchas veces antes de que tuviera la habilidad de hacerlo, así que ahora tiene que demostrarlo. Es entonces una cuestión de carácter, de estar convencido de hacer ese papel, tiene todas las capacidades para hacerlo y depende de él jugar cuando se presente la oportunidad».
Queda por ver si Maguire es capaz de afrontar el reto impuesto por el técnico de 53 años.
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