El martes por la noche, después de la increíble remontada del Barça ante el Benfica, Raphinha se enredó en el túnel de acceso al vestuario con los jugadores rivales. Y su esposa reveló los mensajes de odio que recibió después de la reunión.
Algunos internautas la insultaron violentamente: “puta brasileña”, “esposa de un mono infiel”, “hija de puta”.
Fueron aún más lejos y amenazaron con matar al hijo de dos años de la pareja. Tras su denuncia, varias personas borraron sus cuentas en Instagram.