Karim Benzema fichó por el Real Madrid en 2009, pero cuatro años antes ya había visitado el Santiago Bernabéu. Lo hizo teniendo tan solo 17 años y como gran promesa de un Lyon que se enfrentó en Champions al equipo blanco.
El destino quiso que un chaval de 17 años que visitó en noviemrbe de 2005 el feudo blanco, acabara convirtiéndose en una de las piezas clave de la etapa más exitosa del equipo blanco. Cuando el joven Karim Benzema llegó por primera vez al Bernabéu, nadie podía imaginarse todo lo que pasaría después.
Eso sí, su primera vez en la que actualmente es su casa fue bastante discreta para él. Karim no jugó ni un solo minuto en el 1-1 con el que el Olympique de Lyon empató ante el Real Madrid en la vuelta de la fase de grupos de Champions (los franceses ganaron 3-0 en la ida).
El delantero estuvo en el banquillo la totalidad del encuentro y disfrutó del gran ambiente que reinaba en el equipo blanco. ‘Marca’ recuerda que, en una entrevista concedida años después, Benzema decidió ese día que tenía que jugar alguna vez en el Real Madrid.
Su profecía se acabó cumpliendo, y quizá un buen empujón de moral para hacerlo llegó cuando, tras el encuentro, el presidente del Lyon consiguió la camiseta de Ronaldo Nazário firmada y se la entregó a Karim.
Fuente: besoccer.com
