Derrotado por el Borussia Dortmund (1-2, 1-1 en la ida) este miércoles en la vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones, el Lille concedió un penalti muy polémico, por un ligero empujón de Thomas Meunier en la espalda a Serhou Guirassy. Para el ex árbitro internacional Saïd Ennjimi, no había motivo para pitar esta falta.
«No hay penalti, es extremadamente duro. No hay disputa. El jugador del Dortmund apenas ha sido tocado y está contribuyendo al problema», declaró el exdirigente de la Ligue 1 al diario L’Equipe el jueves. Una declaración que sólo puede reforzar la amargura de los habitantes de Lille…