La semana pasada, el presidente del Paris Saint-Germain, Nasser Al-Khelaïfi, había esgrimido la amenaza de una salida del club de la capital del Parque de los Príncipes. Un estadio del que el PSG quiere hacerse propietario para realizar muchas obras en él con el fin de aumentar los ingresos. Pero el Ayuntamiento de París no parece dispuesto a vender el recinto por menos de 350 millones de euros. Demasiado caro para «NAK», que volvió a dar un puñetazo sobre la mesa en una entrevista con Marca.
“Nuestra primera opción es quedarnos, pero no creo que el Ayuntamiento quiera que nos quedemos. Nos están presionando para que nos vayamos. Llevamos cinco años hablando con ellos. Cada vez son las mismas falsas promesas: hoy, mañana, estas elecciones, las próximas elecciones… Estamos cansados de todo. Necesitamos un trato justo. Amo el Parc des Princes, es nuestra historia y lo respeto. Más que nada, y permanecer siempre ha sido nuestro primera opción. Pero no creo que nos quieran allí», dijo el técnico del vigente campeón de Francia.
«En el estadio se han invertido cerca de 80 millones de euros de nuestro bolsillo, pero no es nuestro estadio, ¿quién más lo haría? Queremos un estadio como todos los demás clubes, tenemos que aumentar nuestros ingresos, tener un mejor estadio para nuestra afición y que entren más aficionados de los que podemos acomodar. El ayuntamiento cree que estamos bromeando, pero no lo estamos y nos tomamos muy en serio otras opciones. Estamos analizando otras opciones. Otras opciones porque creo ya no somos bienvenidos en el Parque de los Príncipes. Están jugando con nosotros y ya hemos tenido suficiente”, concluyó el líder parisino.
El mensaje llegó.
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