Muy por encima pero muy ineficaz en el último gesto, la selección francesa superó con facilidad (0-3) a Gibraltar este viernes en Faro (Portugal) por la 3.ª jornada de los playoffs de la Eurocopa 2024. Un tercer éxito en otros tantos salidas para los Blues que tienen la oportunidad de tomarse el descanso contra Grecia el lunes.
Tres minutos. Fue el tiempo que le tomó a los Blues romper la cerradura. En un centro milimétrico de Coman, Giroud voló para marcar con un potente cabezazo (0-1, 3º). ¿Un gol rápido que llamó a otros? No realmente. Archidominante, la formación tricolor intentó sortear el denso bloque contrario y mandó muchísimos centros sin peligro. Pero al margen de un disparo de Coman desviado por Coleing, ninguna oportunidad clara para meterse en la boca del partido. En un césped difícil, los franceses se las arreglaron sin forzar realmente.
Hubo que acercarse a la media hora para presenciar ocasiones claras con un disparo de Camavinga cerca de encontrar el lucernario mientras Tchouaméni tocaba el larguero en el córner que siguió. Pese a este ligero comienzo, los Blues jugaron sin mucha convicción y no estuvieron lejos de ser sorprendidos en un tiro desde 55 metros de El Hmidi que coqueteó con el larguero de un Samba demasiado adelantado. Antes del descanso, Mbappé, junto al plato del gol durante 45 minutos, transformó un generoso penalti por mano de Chipolina (0-2, 45º+3).
El segundo tiempo volvió a empezar en las mismas bases con los franceses que acampaban en el área contraria pero que carecían de realismo, como gran jugada que se inventó Griezmann. A partir de entonces, no pasó nada o casi nada durante 20 minutos. Un segundo tiempo muy pobre que cobró vida al final con un gol en propia puerta de Mouelhi tras un centro raso de Mbappé (0-3, 78º).
Últimos escalofríos para Coleing, dos golpeteo en su barra, uno Tchouaméni y otro de Disasi al final del partido. Sin brillar, la selección de Francia aportó lo imprescindible.
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