No corren buenos tiempos para el Olympique de Lyon. El conjunto de Bruno Génésio sumó su segunda derrota consecutiva en liga, tercera contando el KO copero ante el Rennes, en el campo de un Nantes que con los tres puntos se acerca al objetivo de la permanencia.
Dembélé tuvo la primera oportunidad del partido en lo que parecía un inicio con dominio visitante. Fue un espejismo. El Nantes tuvo mucha más constancia en su juego y en uno de sus primeros acercamientos no perdonó. Majeed filtró un pase a la espalda de Denayer y Coulibaly cazó el envío para batir por abajo a Lopes.
El cuadro lionés no se sintió nada cómodo en la primera mitad y los problemas se le multiplicaron cuando pasada la media hora Tousart tuvo que ser sustituido por unas molestias en el tobillo. Dembélé parecía el único entonado y un testarazo suyo se fue por poco en el minuto 35.
Rongier y Toure pusieron a prueba a Lopes antes de la primera mitad pero cuando más se olía el segundo tanto local Terrier decidió hacer acto de presencia. El extremo galo recibió un pase en la frontal y con un disparo seco y colocado igualó la contienda. El gol no estuvo exento de polémica ya que el Nantes reclamó una posible mano de Aouar en área propia al inicio de la jugada así como un fuera de juego posicional de Memphis en el tiro de Terrier que pudo haber interferido en la visión de Tatarusanu. El colegiado escuchó indicaciones desde el VAR pero no revisó la jugada.
Con la inercia positiva del postrero tanto en la primera mitad, el Lyon salió mandón en la reanudación y esos fueron los mejores minutos de los de Génésio. Terrier, Aouar y Dembélé tuvieron las mejores ocasiones, pero ahí emergió la figura de Tatarusanu, que fue un muro e impidió que el electrónico se alterara.
Fuente: sport.es
