Efecto dominó. El fichaje de Neymar por el París Saint-Germain ocasiona un daño colateral al resto de los equipos europeos que cuentan con potenciales estrellas en sus planteles. El golpe de gastar 222 millones de euros en un solo jugador y que encima sea el Barcelona quien se quede sin esa estrella convierte al PSG en un club seductor para cualquiera. Dani Alves, Verratti, Di María, Cavani, Neymar y varios talentos más convierten al vestuario del Parque de los Príncipes en una plaza muy atractiva para otras figuras.
Entre los jugadores que también podrían hacer saltar la banca en el mercado de pases está Kylian Mbappé. El joven delantero francés de apenas 18 años, apuntado como el «nuevo Henry», tuvo un rendimiento formidable en las instancias de eliminación directa de la última Champions League. Los dirigentes del Monaco saben que no podrán disfrutarlo por mucho tiempo más y por eso recurrieron a todas las maniobras posibles para retenerlo: mejora contractual y tasación altísima. Se estima que su cláusula de rescisión fue establecida en 180 millones de euros.
Fuente: pasionfutbol.com