Anunciado el año pasado, el cambio se produjo este verano en el PSG, con la salida de varios nombres importantes de la plantilla como Lionel Messi, Sergio Ramos, Neymar y Marco Verratti, y la llegada de once nuevos jugadores a la plantilla. Así, Randal Kolo Muani, Ousmane Dembélé, Lucas Hernández y Manuel Ugarte se han sumado a las filas de Luis Enrique, nombrado al frente del primer equipo en sustitución de Christophe Galtier.
A partir de ahora, el estilo de juego del PSG parece tan importante como los resultados a ojos de los dirigentes, después de varias temporadas complicadas marcadas por dos eliminaciones consecutivas en la Liga de Campeones desde los octavos de final. Además, Qatar se niega ahora a hacer de esta famosa Liga de Campeones su única prioridad. “La Liga de Campeones no es una obsesión en absoluto, se acabó. Lo dije durante la primera rueda de prensa con Luis Enrique”, afirmó Nasser Al-Khelaïfi, citado por RMC.
El PSG está en plena metamorfosis, con ganas de darle las llaves a Luis Enrique con la esperanza de que los resultados sigan. “Estamos construyendo una nueva identidad, nuestro propio estilo, nuestros propios principios de juego, un juego ofensivo y una nueva cultura”, indicó también el presidente del PSG.
«Esto es lo que queremos y los resultados llegarán. Queremos que nuestros jugadores disfruten jugando, nuestro personal disfrute entrenando y nuestros seguidores disfruten viendo», dijo.
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