Al final de un partido completamente perdido disputado sobre un terreno inundado después de la hora de juego, el Niza recibió una bofetada ante la Lazio (4-1), este jueves, en la 2ª jornada de la Liga Europa.
Bajo la lluvia torrencial en Roma, los dos equipos se observaron y se devolvieron los golpes. Sin embargo, uno de ellos golpeó mucho más fuerte: la Lazio. Mientras Castellanos remataba de cabeza en largo el palo y Vecino pegaba al larguero un disparo desviado, Pedro tuvo mucho más acierto engañando a Bulka desde muy cerca con un cañonazo pegado al palo superior (1-0, 20). Una apertura de puntuación lógica para la formación más emprendedora.
De espaldas a la pared, el Niza se recuperó bastante bien y ofreció algunas secuencias interesantes. Si Bouanani obligó a Mandas a hacer una buena parada, Castellanos hizo el descanso manteniendo la calma con un bonito lanzamiento en picado (2-0, 35). Un nuevo golpe para los Aiglon que estaban recibiendo una lección de realismo. Pero se necesitaba más para derribarlos y en una de sus raras aceleraciones, Boga confió en Moukoko para revivir a su equipo con un bonito centro (2-1, 42).
Al regresar del vestuario, las condiciones climáticas empeoraron y el terreno de juego se transformó en una piscina. Superficie ideal para Castellanos, que nadó como pez en el agua con un nuevo gol de gran categoría con un potente disparo a la escuadra tras superar la defensa del Niza (3-1, 53). Insostenible, el delantero centro que pasó por Girona obtuvo incluso un penalti tras un ligero contacto con Bulka para permitir a Zaccagni anotar un poco más (4-1, 67º).
En el fondo de la piscina, los niçois tuvieron mala suerte y vieron a Guessand tropezar con Mandas, autor de una parada poco académica. Un partido que se convirtió en ridículo con un borde del campo intransitable donde el balón ya no avanzaba… Mala noche para los Aiglons a los que les faltó todo: realismo, personalidad e incluso agresividad contra unos biancocelesti mucho más avezados y decididos. Tendremos que hacerlo mucho mejor dentro de tres semanas en Ferencvaros…