En su segundo y último partido de preparación para la Eurocopa, Francia se enfrentó a Canadá (0-0), este domingo en el Matmut Atlantique de Burdeos. Un encuentro sin mucho sabor y con pocas lecciones que aprender para Didier Deschamps.
Retrasado 15 minutos en TF1 tras el anuncio de la disolución de la Asamblea Nacional por parte de Emmanuel Macron, el partido comenzó a mil kilómetros por hora. Inicialmente obstaculizados por la presión canadiense, los Bleus tuvieron dos grandes oportunidades gracias a Kanté y Thuram, que a su vez se toparon con Crépeau.
Un comienzo ilusionante posible gracias a un Dembélé muy impactante y en el origen de las mejores acciones francesas, como el disparo de Griezmann desviado con la punta de los dedos por el portero contrario.
Con el paso de los minutos, el dominio francés se fue desvaneciendo y los visitantes incluso empezaron a hacerse con el control del balón gracias a una sorprendente calidad técnica. Símbolo de esta bella gestión del cuero, Koné, que organizaba el juego con clase y autoridad. Un partido equilibrado y que se cerró con muy pocas situaciones hasta el descanso, culpa (o gracia, depende) de unas defensas colocadas y bien agrupadas ante unos atacantes cada vez menos inspirados.
Al regresar del vestuario, Miller estrelló el larguero de Maignan con un magnífico tiro con efecto. Alerta muy caliente para los azules, incapaces de coger ritmo y terriblemente torpes en lo que hacían. Ante la falta de soluciones, los extremos empezaron a centrarse en el área con la esperanza de encontrar a Giroud, demasiado solo y sustituido poco después de la hora, entre vítores del público aquitano por su última aparición en Francia.
¿El final del partido? Sin mucho interés. De hecho, hubo esta parada de Saliba para evitar que Osorio recibiera un centro de David o incluso un cabezazo sin cruzar de Kolo Muani. Mbappé, que entró faltando un cuarto de hora para el final, no estuvo muy acertado con un último disparo desviado por Crépeau. Un mal espectáculo que no debió entusiasmar a la afición presente en Burdeos, decididamente poco pulida en los últimos meses.
Un partido al final del cual Didier Deschamps quizás salga con más preguntas que respuestas…
futbolfrances.com