Neymar es feliz en Francia. O al menos lo es durante estos días en los que se encuentra concentrado con la selección de Brasil para disputar un amistoso ante Japón antes de viajar a Londres para medirse a Inglaterra.
Después volverá a la rutina en París. Y no parece que le entusiasme en exceso porque el brasileño no termina de acomodarse a la capital francesa por varios motivos. El más evidente, según la prensa gala, es por el distanciamiento que tiene con su propio entrenador, Unai Emery. Este miércoles L’Equipe ya hablaba de una relación erosionada por una grieta que difícilmente se podrá salvar y los gestos de Neymar con el entrenador donosostiarra demuestran esta falta de ‘feeling’. Y en Brasil, el diario Globoesporte, asegura hoy que el vestuario parisino cree que Emery no tiene «capacidad suficiente para llevar a un club de esa envergadura».
Pero la frialdad con Emery no es el único motivo por el cual Neymar no se encuentra cómodo en la ciudad de las luces. Lo más fácil sería escudarse en idioma, que es un escollo, pero el exazulgrana también echa de menos algunas ventajas que tenía jugar en el Barça. En la Ciudad Condal estuvo protegido desde un principio por un grupo fuerte en el vestuario formado por Messi, Suárez, Piqué, Iniesta… Y en el PSG todavía no se ha creado una piña con suficiente peso ya que el club continúa en plena metamorfosis para conseguir un título europeo. Y a todo esto se suma el roce con Cavani nada más aterrizar en Francia.
Neymar tiene a su ‘hermano’ Alves y al resto de brasileños (Thiago Silva, Marquinhos, Lucas Moura) como vía de escape en los entrenamientos y en las concentraciones, pero también es cierto que otra parte del vestuario ve con recelo ciertos privilegios que se incluyeron en su contrato. Y es que algunas normas del equipo no parecen ir con Neymar: lleva su propia maleta y tiene dos fisioterapeutas exclusivamente para él.
Es por eso que los compañeros brasileños del PSG hacen todo lo posible para que Neymar termine por aclimatarse a París. Aunque para ello tengan que mandar indirectas a Emery cuando se concentran con Brasil. Es el caso de Marquinhos. El central apareció en la rueda de prensa de la ‘Seleçao’ antes de enfrentarse a Japón y ensalzó las maneras de Tite a la hora de llevar vestuarios. “No basta con ser buen entrenador, además tienes que ser buen gestor para trabajar con personas de alto nivel. Tite consigue hacer ese trabajo con excelencia. Es un gran hombre, un gran padre, un gran entrenador y tiene virtudes de grandes personas. Es muy leal a los jugadores y hace que te sientas importante dentro del vestuario y ante las cámaras”, dijo en Francia.
Después se metió de lleno en la aclimatación de Neymar y aseguró que están trabajando para que se sienta como en casa. “Neymar tiene la cabeza bien, es importante para Brasil y estamos intentando de ayudarle para que se haga a París. Creo que se está adaptando a la ciudad, al club y le veo con ganas de conseguir títulos. Ninguno pasa inadvertido y menos las estrellas”.
Al brasileño le va a venir bien este retiro espiritual con Brasil. De hecho, lo ha buscado ya que no fue convocado para el último partido de la Ligue 1 ante el Angers por unos problemas musculares. Por un momento se llegó a dudar de su participación en estos dos, pero la cara de Neymar cambió nada más ver a sus compatriotas y se espera que sea titular en el encuentro en Lille.
Fuente: as.com