No estuvo para jugar el Mundial como titular, y finalmente contribuyó a la clasificación de la selección francesa para una segunda final planetaria consecutiva. Destino sagrado para Théo Hernández (25 años, 12 partidos y 2 goles), goleador ante Marruecos (2-0) este miércoles en la semifinal, que evidentemente mostró una gigantesca sonrisa tras el pitido final.
«No, no nos damos cuenta… Dos finales seguidas, es increíble, es una locura… Hicimos un buen trabajo hoy. Fue duro, pero estamos aquí, ¡estamos en la final! Contra Argentina, va a ser un gran partido. Vamos a trabajar bien para ganar esta final. Tengo un pensamiento para mi hermano Lucas también (lesionado contra Australia y retirado para el resto de la competencia, nota del editor), estará para la final», reaccionó el muy ofensivo lateral izquierdo al micrófono de TF1.
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