La selección olímpica francesa se enfrentará a Argentina en cuartos de final. Es el primer partido entre las dos naciones desde la final del Mundial de Qatar. Por tanto, este duelo es muy esperado, y más aún desde los cánticos racistas de los argentinos hacia los franceses tras su victoria en la Copa América a mediados de julio.
La crisis incluso se volvió diplomática tras la intervención de políticos de ambos países. La tensión corre el riesgo de alcanzar su punto máximo en Matmut Atlantique en Burdeos.
“Hay un partido que preparar personalmente como entrenador. No hablaré de eso (de provocaciones)», advierte Thierry Henry en rueda de prensa, y continúa.
«¿Un deseo de no empeorar las cosas? Para nada, hay ganas de hablar sólo del partido. Es importante”, asegura el técnico centrado en el campo.
El ambiente promete ser electrizante también en las gradas.