Desde la invasión rusa a Ucrania el 24 de febrero, el campeonato ucraniano se suspendió y la mayoría de los jugadores abandonaron el territorio.
Y aunque la situación no parece estar mejorando en el acto, los interesados actualmente no pueden jugar partidos ni tomar una decisión sobre su futuro.
Según distintas cifras, nada menos que 180 jugadores se ven afectados por esto en Rusia y Ucrania, pero la FIFA se plantea ayudarles, según revela el diario L’Équipe.
En efecto, el medio explica que los jugadores podrían ser autorizados a suspender su contrato sin consecuencias legales. Así lo exigía FIFPro, el sindicato de jugadores profesionales, que deja la puerta abierta a una ventana especial de fichajes.
Entre ellos, encontramos el caso de Rémy Cabella (Krasnodar). El excentrocampista de los “Verts” estuvo presente ayer en Forez para presenciar la victoria de la ASSE ante el Metz.
En dificultad en la parte inferior de la tabla, el Stéphanois ciertamente no diría que no al regreso del centrocampista para el final de la temporada.
Entre los nombres más conocidos en Francia encontramos a: Farès Bahlouli, que juega en Metalist Kharkiv en la segunda división 2 y Grzegorz Krychowiak.
En Brasil, muchos equipos han abierto la puerta a los brasileños que juegan para Shakhtar Donetsk y Dynamo Kiev. Por el momento, no se ha anunciado ninguna decisión oficial, pero es probable que se acelere en los próximos días.
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