Este domingo faltará un mes para el partido de ida de octavos de Champions entre el Paris Saint-Germain (PSG) y el Real Madrid y el equipo francés vuelve a parecer un nido de avispas. El retraso de Edinson Cavani y Javier Pastore tras sus vacaciones navideñas ha sembrado la discordia en el vestuario. Y Unai Emery, entrenador del PSG, acusó el viernes a la prensa, empezando por la de Madrid, de intentar desestabilizar al club.
El portugués Antero Henrique, director deportivo del PSG, expresó el viernes su apoyo a las decisiones que Unai Emery “tomó y tomará” para apaciguar el malestar creado en el vestuario por el retraso de Cavani y Pastore, cuya actitud fue criticada por el capitán del equipo, Thiago Silva, a quien el jueves respondió con dureza el propio argentino negando haberle dicho que vaya a dejar el club.
El lío está de nuevo armado en el PSG, pero Unai Emery con quien la tomó fue con los medios y puso como ejemplo la portada de un diario madrileño que especulaba con un posible fichaje de Neymar por el Real Madrid. “Sé que buscan desestabilizarnos desde fuera. Pero eso no nos perturba”, dijo el técnico vasco en la conferencia de prensa previa al partido de mañana contra el Nantes en Ligue 1.
Unai Emery restó importancia al asunto de las incorporaciones tardías de Cavani (dos días, no se excusó) y Pastore (cuatro, pidió disculpas a sus compañeros). “Asuntos internos como las pequeñas cosas que sucedieron en las vacaciones son el 10 por ciento de lo que pasa en el equipo. Vamos a reencontrar la normalidad”, dijo. El entrenador del PSG insistió en que “el grupo está bien, muy centrado en los partidos que vienen y en el duelo ante el Real Madrid”.
Los retrasos de Cavani y de Pastore y las críticas al respecto del capitán, Thiago Silva, han sembrado la discordia en el millonario vestuario del PSG. Según el diario L’Équipe, en el enfrentamiento en un lado están los latinoamericanos hispano-hablantes, como Cavani y Pastore, y en el otro los de habla portuguesa, como el capitán Thiago Silva, Dani Alves y Neymar. En diciembre Neymar recibió permiso para viajar a Brasil a ver a su hermana enferma, pero aprovechó para participar en una fiesta, de la que circularon fotos en las redes sociales.
Fuente: mundodeportivo.com